Día 11 «La custodia del corazón (I)»
¿Qué hay y qué entra y dejo entrar en mi corazón? […] sed que trato de colmar amargamente, tantas veces inconscientemente.
¿Qué hay y qué entra y dejo entrar en mi corazón? […] sed que trato de colmar amargamente, tantas veces inconscientemente.
Estás llegando a todos los rincones de mi vida y eso me da alegría.
Renuncio al móvil y sus seducciones. Solo la herramienta quiero. Renuncio a cada mirada mal echada. A cada silencio que me ha aísla. Al ruido que me hace huir.
Vuelve a mí este abismo de dolor. El filo en el que me muevo entre abismo y abandono qué fino es. Quiero dejártelo todo Señor, todo este dolor, mi desesperanza conviértela en anhelo de Ti, mis pensamientos, mis temores, mis incoherencias, mis debilidades y límites. Todo te lo entrego.