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Vivir la Belleza. Una propuesta de adviento inspirada en Isaac de Nínive

El sacrificio -dice Dios- más precioso que a mí me complace son vuestras obras bellas y la íntima devoción del corazón. Tierra buena que alegra a su Señor dando por fruto el ciento por uno es el alma que se purifica con el pensamiento fijo en Dios, vigilando atentamente noche y día.

Enseñanzas de Isaac de Nínive (I)

Lo primero que el maestro Isaac nos enseña es no escandalizarnos de nuestra propia debilidad. Lo que tantas veces pensamos que es nuestro obstáculo a la santidad, en realidad es nuestro camino hacia ella.

Las puertas del silencio

Hace tiempo escuché el vídeo de referencia, del que más tarde encontré su soporte escrito. Se trata de un escrito anónimo de un monje cartujo.
¿Qué tiene un cartujo para mí? Mi corazón desea este silencio, busca este encuentro con Dios, esa unidad e identificación con el Creador.

El desprendimiento de las pasiones (VII)

El maestro dijo: “La purificación del corazón hace inquebrantable el espíritu del hombre, y le vuelve apto para recibir el estado que busca. La oración es la conversación de nuestro espíritu con Dios.

La oración del corazón (VI)

No debéis poner vuestra seguridad solamente en las Escrituras de tinta, pues la gracia de Dios inscribe las leyes del Espíritu y los misterios celestes también sobre las tablas del corazón, y el corazón es el que manda y rige todo el cuerpo

Día 3 «La custodia del corazón (I)»

Ven Espíritu Santo. Inúndame de serenidad. Da paz a mi alma. Esta noche hemos estado con unos amigos. Tal y como preveía ha sido convulso. Espero para bien. Creo que he dicho las cosas que tenía que decir. Es verdad que tanta violencia no sé si es necesaria.

El fuego que purifica el corazón (IV)

Un día tres jóvenes fueron arrojados a un horno de fuego por un vil tirano al negarse a renunciar a su fe en Dios. Sin embargo, el fuego que baja del cielo llenaba sus corazones

¿Qué es el corazón? (III)

Ahora bien, dentro de este hombre interior el espíritu es lo más profundo, como el ojo que escruta el horizonte, y es capaz de ver y distinguir a los enemigos cuando se acercan.

Discernir los pensamientos (II)

El que quiera encontrar la paz del corazón deberá combatir. Pues, el alma, bajo el peso del pecado, avanza como a través de un campo lleno de maleza y zarzas. Aquel que quiere atravesarlo tiene que tomar la penosa tarea de abrirse paso a la fuerza.

La custodia del corazón (I)

Un joven monje le preguntó al anciano Macario ¿Cómo puedo tener paz en mi corazón? Cuando comienzo a hacer silencio, miles de imágenes y pensamientos invaden mi mente.